lundi 12 octobre 2009

BICENTENARIO: NADA QUE FESTEJAR... 200 AÑOS DE RESISTENCIA A LOS ESTADOS GENOCIDAS


200 años de resistencia lleva el Pueblo Nación Mapuche (Wallmapu) a los Estados chileno y Argentino... En Chile, la historia estatal en territorio ancestral (Ngulumapu) a causa de la invasión bélica solo tiene 128 años (llamada "pacificación de la Araucanía")y de argentina 126 años (campaña del "desierto" en Puelmapu). Hoy, así como en diversos lugares se realizan manifestaciones, en Chile, la principal manifestación es en Santiago por autoconvocatoria, con cientos y miles expresándose.

BICENTENARIO: NADA QUE FESTEJAR
200 AÑOS DE RESISTENCIA AL ESTADO GENOCIDA
Por Organización Mapuche Meli Wixan Mapu
Se acerca el 12 de octubre, un día doloroso en la historia de los pueblos originarios y son muchas las cosas que queremos plantear y denunciar.

Pu lamgen, la clase política chilena ha estado celebrando con bombos y platillos la llegada del Bicentenario. Se han hecho comisiones, abunda la publicidad y chorrea el dinero por todos lados. Pero… ¿Qué son estos 200 años para la nación mapuche? ¿Qué son estos 200 años para los distintos pueblos originarios que habitamos este territorio hace milenios? ¿Qué tenemos que festejar nosotros? ¿Qué tenemos que conmemorar? NADA, PU LAMGEN, NADA.

Son dos siglos de presencia del Estado en nuestras tierras, porque antes de eso el Estado no existía…Son dos siglos de política genocida, de matanza, de humillación, de racismo… Son dos siglos de usurpación y despojo del lugar en el que habitábamos con libertad. Son dos siglos de ocupación. Son dos siglos de COLONIZACIÓN.

El Estado Chileno fue el último agente COLONIZADOR. Antes nuestro pueblo ya se había enfrentado al INCA y al ESPAÑOL, logrando frenar los avances ambiciosos sobre nuestro mapu. Hace no tanto tiempo, en el siglo XIX, cuando la república chilena tenía apenas 50 años, el Estado ingresó con sus militares y sus armas a nuestro espacio; quemó las ruka, incendio las siembras, mató a familias completas. Se quedaron con casi toda nuestra tierra y se las entregaron a chilenos con dinero, a militares, a franceses, italianos y alemanes, suizos, quienes instalados continuaron cometiendo abusos. Fue el Estado el que nos encerró en reducciones, pensando que ahí acabaría nuestra historia.

Pu lamgen, que no se nos olvide tan fácilmente lo que pasó y lo que sigue pasando.
La memoria del mapuche no es y no debe ser tan frágil.

¿Qué significan estos 200 años para nosotros?
Significan dos siglos de opresión, dos siglos en que libertad de nuestro pueblo ha sido pisoteada. Son dos siglos en que constantemente se ha pretendido borrar nuestra existencia como una nación y, por lo mismo, se han negado nuestros derechos colectivos: el derecho a la autodeterminación, es decir, a decidir por nosotros nuestro futuro, nuestra política, nuestra economía, nuestras autoridades, nuestros símbolos; se ha negado el derecho al territorio, en el que vivimos libres y soberanos anteriormente, pero que nos fue robado por el invasor a sangre y fuego; se ha negado los derechos educativos y lingüísticos, y el derecho al ejercicio libre de nuestra espiritualidad.

Pu lamgen, hoy la opresión es la misma. Seguimos siendo un pueblo sin libertad.
Las clases poderosas de este pías nos quieren engañar con políticas públicas que intentan la integración rápida al Estado. Políticas que niegan nuestra existencia como nación, reconocimientos que parecen fraudes. ¿Cómo vamos a confiar en ellos cuando dicen que la Nación chilena es única e indivisible? ¿Cómo va entender eso un mapuche, si nuestro pueblo, nuestra nación, lleva miles de años en esta tierra y es anterior al Estado chileno? ¿Cómo pretende la concertación, la derecha y la izquierda nacionalista que entendamos los mapuche que somos parte de la nación chilena?

Por todo esto, pu lamgen, es que fuertemente decimos: ¡NO HAY NADA QUE FESTEJAR!, ¡NO HAY NADA QUE CELEBRAR! No nos confundamos hermanos, no nos olvidemos de lo que ha pasado en nuestra tierra. No hagamos como aquellos que le desfilan al ejército genocida, no nos equivoquemos porque nuestra historia y nuestros hijos nos van a juzgar por lo que hicimos.

NO HAY NADA QUE FESTEJAR, hermanos, reiteramos. La política de negación continúa. Nuestras demandas de autodeterminación y territorio no son escuchadas, no son consideradas y la respuesta que recibe el movimiento mapuche es la mano dura de la represión policial, es el rigor y el fraude de las leyes que el Estado ha creado y que tiene a cientos de nuestros hermanos como presos políticos. Hace poco asesinaron por la espalda al Weichafe Mendoza Collío, anteriormente habían matado a Matías Catrileo, Alex Lemún, Zenón Díaz Necul, Julio Huentecura, Jorge Suárez Marihuán. Juan Collihuin, Jonny Cariqueo. Y si nos vamos hacia atrás, la lista de muertes e injusticias se extiende por décadas y décadas.

Pu lamgen, este Bicentenario no es más que un juego de luces y dinero, parafernalia patriotera. Nadie tiene nada que celebrar cuando se nos han impuesto himnos, banderas y simbolismos militares, cuando se nos ha impuesto una nacionalidad que no es la nuestra.

Pu lamgen, con todo respeto también preguntamos a la sociedad chilena y sobretodo a quienes solidarizan con nuestra causa ¿QUÉ VAN A CELEBRAR LOS CHILENOS? Si van a celebrar su liberación de la colonia española, entonces ¿por qué esa libertad no ha llegado a nosotros?
Les preguntamos con todo el respeto que se merecen ¿Puede un pueblo y una sociedad como la chilena ser libre y celebrar mientras todavía se oprime a nuestra nación después de 200 años? ¿Puede ser libre un pueblo cuando sus recursos marinos se los entregan a los grandes buques factorías? ¿Puede ser libre un pueblo cuando regalan el cobre a los millonarios consorcios extranjeros? ¿Puede ser libre un pueblo cuando Endesa es dueño se casi todas sus aguas? ¿Puede ser libre un pueblo cuando la máquina del Estado-Nación ha anulado sus expresiones populares, sus carnavales y tradiciones imponiendo fechas y recuerdos militares? ¿Festejan lo mismo los que adulan a Piñera y su fascismo liberal, que los que recuerdan a Víctor Jara o Salvador Allende? ¿Es la misma fiesta para los ricos que para los que viven el día a día con pan y té?

Hermanos del pueblo chileno, sabemos que muchos de ustedes también reflexionan sobre este bicentenario, sabemos que mucho se lo cuestionan, que muchos de ustedes no se sienten llamados en esta fecha. Es precisamente con ese sector de la sociedad chilena que queremos dialogar, trabajar y abrir puertas para que nuestras demandas sean escuchadas, respetadas y construidas, mirando hacia un futuro mejor
Pu lamgen, para terminar…

Nuestro pueblo continuará resistiendo, aún queda un largo trecho por recorrer y nunca está de más hacer una llamado a la UNIDAD. Hoy tenemos demasiadas divisiones internas, demasiados liderazgos egocéntricos y organizaciones con aires de vanguardia. Mirar al futuro significa potenciar nuestras afinidades y no nuestras diferencias, borrar nuestras propias categorías que nos segregan y pensar como un PUEBLO MAPUCHE UNIDO, y entender que cualquier miembro de este pueblo puede luchar desde donde esté, porque la LUCHA es de TODOS, LA LUCHA NO TIENE DUEÑOS. El objetivo es hacer realidad el sueño de volver a ser un pueblo libre, con su territorio propio, con su propia política, abierta, inclusiva; con su propia economía, no destructiva, cuidadosa de nuestro espacio.
En fin, un pueblo que decida POR SI MISMO.

Fei Ka Müten
Por Organización Mapuche Meli Wixan Mapu
Octubre 2009

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