samedi 17 avril 2010

Bolivia llama a la humanidad a detener la destrucción del planeta


El Presidente Evo Morales dice que la Tierra puede vivir sin nosotros, pero nosotros no podemos vivir sin la Tierra. Con estas palabras el Cónsul boliviano en Chile Waker San Miguel (en la Foto) continuó apoyando a las organizaciones y comunidades chilenas a participar en la reunión de los Pueblos sobre Cambio Climático.

(Ecoceanos News)/ El Cónsul de Bolivia en Chile, Walker San Miguel, afirmó este miércoles que con la Cumbre de los Pueblos Contra el Cambio Climático y en Defensa de la Madre Tierra, su país es el canalizador de la demanda de los pueblos del mundo que exigen a sus gobiernos tomar decisiones rápidas para detener la destrucción del planeta.

“Bolivia está siendo canalizador de una demanda mucho mayor que es la de demanda de sociedades, de pueblos indígenas, de seres de todo el planeta que le reclaman a sus gobiernos a tomar decisiones rápidas y que por lo menos frenen el acelerado deterioro de nuestro planeta”, dijo el diplomático en un encuentro con organizaciones sociales chilenas en Santiago.

El Cónsul afirmó que “después del fracaso de Copenhague, que termino sin un acuerdo”, el presidente Evo Morales realizó esta convocatoria que luego de cuatro meses culminará con la reunión de Cochabamba
“Miles de ciudadanos del mundo preocupados de este problema, miles de mujeres y hombres de Latinoamérica, de África, de Asia, de los movimientos indígenas”, llaman a “la humanidad entera a participar activamente de modo que otro foro de la ONU que tenga la calidad vinculante, resuelva poner fin a un marcado genocidio que es lo que puede venir y a una acelerada destrucción del planeta Tierra”, afirmó San Miguel.

El representante de La Paz dijo que con el Cambio Climático “todos los seres humanos nos vemos afectados” y esta situación “va agudizarse de no frenarse este sistema y modelo perverso de explotación de los recursos naturales y de excesivo consumo, como es el sistema capitalista mundial”.

El Cónsul instó a que después de Cochabamba se realice “un seguimiento a lo que se diga, a lo que proponga, a lo que se escuche en este diálogo de esta Cumbre y a partir de ahí generar una conciencia de activa de participación de la ciudadanía de todos los confines del planeta”.

1 commentaire:

Luis Eduardo Siles a dit…

Hay demagogias de proporciones tan descomunales que pasan al ámbito del surrealismo, son imposturas al límite de lo diabólico, cinismos que necesitan algún nuevo superlativo.. Este es el caso de la la cruzada internacional a favor del medio ambiente y de la “madre tierra” que intenta presentar como su nueva identidad ideológica el señor Evo Morales, iniciativa que tiene una consistencia ética parecida a una convocatoria de Osama Bin Laden a la Paz mundial.

La producción de hoja de coca, sustento político, económico, y principal fuente de legitimidad presidencial, ha experimentado un crecimiento geométrico desde 2006, incluyendo el cultivo en casi todas las áreas protegidas, y es responsable de la mayor devastación de las tierras fértiles en Bolivia desde que los conquistadores españoles decidieron acabar a plan de incendios el manto vegetal altiplánico. A la esterilización producida por el arbusto, que imposibilita cultivos posteriores durante una década y cuya superficie aumento en nueve veces durante la presidencia de Morales hasta alcanzar hoy 50 000 hectáreas , se deben agregar la inmisericorde y descontrolada vertida de miles de litros de residuos altamente tóxicos de acido sulfúrico, cal viva y otros químicos, derivados de la masiva producción de cocaína que a migrado de sus lugares de producción en el oriente a zonas peri urbanas y rurales del occidente. Morales incluyó a la hoja de coca, sin la cual es obviamente imposible producir cocaína, en la constitución y el canciller Choquehuanca propuso que los niños de Bolivia debieran tomarla en el desayuno en vez de la leche.

Esta devastación es gravísima e ilustra la hipocresía de un gobierno que vocifera sobre el agua como un derecho humano, por ejemplo, pero que permite que la minería transnacional contamine como nunca los acuíferos del altiplano y como en el caso de San Cristóbal en pocos años habrá consumido por si sola tales cantidades que habrá convertido el sur de Bolivia en un desierto hasta debajo de la superficie.

El “sagrado” lago Titicaca se ha convertido en una cloaca producto del derrame de aguas servidas que ha crecido sin que se haya definido una política pública sobre esta problemática que ha confinado la presencia piscícola a las áreas de granja y a las especies que aun toleran esta contaminación. En el carnaval de Oruro, bajo la etiqueta de respeto a las “culturas ancestrales” miles bailaron haciendo sonar instrumentos musicales y exhibiendo vestuarios hechos con especies en extinción sacrificadas expresamente ignorando no solo las leyes sino los ruegos de organizaciones medioambientalistas y ciudadanos.

Ufano de su relativo apoyo electoral, el gobierno seguirá sembrando las canchas de futbol de todo el país de césped sintético para que armonice con alfombra de basura plástica que acompaña al viajero a lo largo de todas las carreteras y que es la cotidianeidad de la mayoría de los pueblos, e incluso de ciudades como Oruro y Cochabamba. En esas condiciones presentarse con una careta medioambientalista es una desfachatez descomunal, una indecencia cínica y grotesca.