vendredi 18 mars 2011

Chile y el conflicto por energía Nuclear: "Este es un nuevo autogolpe a la credibilidad del Presidente"


Así lo señaló el Senador Alejandro Navarro, quien indicó: “Considerando que la posición antinuclear suscrita públicamente por el entonces derrotado candidato Sebastián Piñera el 2006 y la política que promueve hoy como Presidente de la República, claramente no es coherente”. El senador agregó: “este es un nuevo episodio de autogolpe a su credibilidad política que lo obliga a ser más cuidadoso, porque si él no lo hace, nadie lo va a hacer por él”.

Imagen: bbc.co.uk

El legislador y presidente del MAS recordó que “lo suscrito por el actual Presidente ante el anuncio del inicio de estudios nucleares por parte del gobierno pasado y que nosotros también suscribimos, se manifestaba claramente la inconveniencia de centrar el esfuerzo político y económico nacional en la opción nuclear que tiene altos costos y graves riesgos asociados y frente al que además Chile tiene claras y atractivas alternativas de energía limpia y renovable”.

“Eso -añadió- es exactamente lo opuesto a lo que se está promoviendo desde el gobierno, con el biministro Golborne, el hombre nuclear, convertido en agente promotor de las empresas que se que quieren instalar en nuestro país, y que vienen haciendo un fuerte lobby desde hace ya varios años, el que se ha traducido en la decisión política de ya dos gobiernos de generar las condiciones para el desarrollo de la energía nuclear en Chile, destinando para ello cuantiosos recursos públicos en el presupuesto nacional”.

Navarro sostuvo que “el Presidente tiene la oportunidad histórica de adoptar las medidas que nos permitan desarrollar las enormes potencialidades naturales que tiene Chile, a través de incentivos y un fuerte impulso a energías renovables no convencionales cuyas fuentes están a la vista a lo largo de nuestro territorio. Las energías eólica, solar, mareomotriz y geotérmica, entre otras tienen todo para convertirse en parte importante de nuestra matriz energética, pero lamentablemente intereses particulares han impuesto el lobby termoeléctrico y nuclear”.

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