Reafirman su compromiso con la lucha que lleva a cabo el movimiento estudiantil, defienden la importancia de los horarios protegidos y acusan al gobierno de tratar de acabar con las universidades publicas.
Ante el plebiscito desarrollado el día miércoles, 2 de noviembre, en la Universidad de La Frontera, los académicos del Departamento de Lenguas, Literatura y Comunicación manifestamos lo siguiente:
1. Reiteramos nuestro convencimiento sobre la absoluta necesidad de reformular profundamente el sistema educacional vigente en nuestro país, especialmente en lo referido a la obligatoriedad del Estado de garantizar a todos los chilenos el acceso a una educación pública, gratuita y de calidad, requisito esencial para el desarrollo humano, social y económico de la nación.
2. La Universidad Estatal es el lugar, por antonomasia, donde aún se fomenta y cultiva el pluralismo real, el disenso y el espíritu académico auténtico y libre de ataduras de toda especie. De allí que conservar y fortalecer estos valores sea un imperativo para todos los miembros de nuestra comunidad universitaria.
3. Lo anterior no es una mera declaración de principios, pues hoy se valida y se fortalece la vocación libertaria de la Universidad de la Frontera con el acto democrático llevado a cabo por sus estudiantes, quienes en un ejercicio ejemplar han optado por realizar un cambio de estrategia para enfrentar la profunda injusticia que afecta nuestra sociedad.
4. En este contexto, valoramos que la comunidad estudiantil haya comprendido la compleja problemática económico-administrativa que la Universidad habría enfrentado en caso de no retomarse las actividades regulares. Dicha problemática se origina en un gobierno que se ha mostrado incapaz de oír las justas demandas de los ciudadanos.
5. Por lo anterior consideramos al plebiscito como gesto de comprensión y compromiso hacia la Universidad.
6. Hacemos un llamado a toda la comunidad académica a respetar los acuerdos en los que nos hemos comprometido a darle nuestro apoyo a la continuidad del movimiento, mediante la flexibilidad horaria y otros pactos por todos conocidos. Es nuestro deber cumplir con quiénes han sido capaces de levantar el tupido velo que cubría el sistema de financiamiento universitario, y es un tema de ética profesional cumplir con la palabra empeñada.
7. Llamamos a la comunidad académica a mantener un diálogo crítico con los estudiantes respecto del modelo económico que rige el actual sistema educacional. El hecho de que el gobierno persiga abiertamente el debilitamiento de las universidades estatales hace imperativo que la lucha por una educación pública y de calidad para todos involucre a los tres estamentos de nuestra casa de estudios. Sabemos que esta lucha no será de corto plazo; por lo mismo, apoyamos el cambio de estrategia para enfrentar este nuevo escenario..
8. En virtud de lo anterior, ofrecemos a los estudiantes nuestro apoyo y participación para generar y mantener espacios de diálogo permanentes donde se traten las temáticas levantadas por el movimiento.
9. Felicitamos a los estudiantes de la Universidad de la Frontera y, por su intermedio, a todos los estudiantes chilenos. Ellos, en un gesto inédito, han dado el primer paso hacia un sistema educacional fundado en la equidad, la justicia social y el bien común. La historia la han construido quiénes han sido capaces de levantarse contra la opresión y la injusticia; de ahí que este movimiento tenga un carácter histórico y, por ende, está fuera de toda duda que de aquí en adelante, obrando con tesón y voluntad, se generarán cambios sustantivos en el sistema educacional chileno.
Académicos Departamento de Lenguas, Literatura y Comunicación
Universidad de La Frontera
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