El nuevo aeropuerto internacional denominado “La Araucania” emplazado en la localidad de Quepe a 20 kilómetros de la ciudad de Temuco, recientemente entró en operaciones con un flujo estimado de 1.500 pasajeros diarios según cifras oficiales. Obra consumada bajo la anterior administración de Bachelet mediante una serie de operaciones financieras, transacciones de terrenos entre personeros afines al proyecto y acuerdo político-empresarial afianzado bajo el gobierno de Piñera donde se construyó.
Cada gobierno (concertación y derecha) usó y manipuló a su antojo la idea de diálogo y participación de las comunidades mapuche del entorno al proyecto, levantando organizaciones fantasmas y paralelismo al interior, cooptando dirigentes para arribar a falsas negociaciones y compensaciones consistentes en subsidio habitacional “pertinente”, posos, limpieza de canales, arreglo de caminos y otras de similar talla.... todo ello, en nombre del progreso y del desarrollo, cuyo principal promotor fue el falso lonko Hugo Alcaman Rifo -hoy, promotor gubernamental de la "región plurinacional" como se le denomina ahora a las modernas formas de asimilación.
Junto con ello, se habrían definido 4 zonas de guillatuwe (ceremonial sagrado mapuche) para “resguardar” su realización mediante la desviación de vuelos en el despegue y aterrizaje de aviones en el terminal aéreo. En el marco del reciente inicio de las operaciones de vuelos, algunos dirigentes mapuche del entorno llegaron a los últimos públicos acuerdos o negociaciones con el actual Intendente de Bachelet en la zona (Hunchumilla) en materia de tierras.
En paralelo, las comunidades del territorio de Trapilwe que jamás llegaron a ningún tipo de acuerdo ni negociaciones en el contexto del nuevo aeropuerto y sobre lo que hay pública información respecto de oposición frontal a su construcción, en las últimas semanas han incrementado la presión al gobierno a fin de que ordene la suspensión total de los vuelos para los días 18 y 19 de diciembre dado que realizarán su tradicional guillatún. Al respecto, el werken Javier Meliman ha señalado que: “Nosotros siempre resistimos de frente a ese megaproyecto, pero la compra venta de migajas al final ganó y algunos siguen negociando. Xapilwe jamás negoció nada, ni siquiera zona de guillatuwe como le llaman. Lo que ahora estamos exigiendo es la suspensión total de los vuelos para esos dos días, en caso contrario, las comunidades y los lonko de Xapilwe dejarán en libertad de acción a los weychafe para que tomen las medidas que corresponden para este tipo de casos”. puntualizó el vocero mapuche.
Entre las acciones desarrollas por los representantes de las comunidades del sector, está una manifestación frente a las oficinas del Ministerio de Obras Públicas y una reciente ocupación del mismo terminal aéreo donde han entregado un documento al Director de Aeronáutica Civil.
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