Con acciones judiciales y administrativas buscan detener funcionamiento de Complejo Nueva Aldea

Acciones judiciales y administrativas emprendieron vecinos del sector Boca Itata, en la comuna de Trehuaco, provincia de Ñuble, para evitar que el Complejo Nuevo Aldea siga operando el ducto a través del cual evacua sus residuos industriales al mar.

Fuente:  www.tribunadelbiobio.cl

Esto, luego del derrame de una cantidad no determinada de líquido industrial en terrenos de pequeños campesinos de la comuna de Trehuaco, afectando alrededor de 7 hectáreas, ocurrida el jueves.

Ante este daño, el presidente de la Junta de Vecinos de Boca Itata, Omar Gutiérrez junto al senado Alejandro Navarro, interpuso una denuncia ante la Superintendencia del Medio Ambiente. Navarro criticó la tardanza de la empresa en reaccionar, asegurando que demoró cerca de 12 horas en frenar la emanación de líquido desde el ducto.

Este vertimiento ha provocado preocupación en las 28 familias que habitan el sector y que viven, principalmente, del cultivo de la tierra. Es así como en una declaración, los vecinos expresaron su inquietud ante el daño que este derrame puede haber ocasionado a sus siembras de papas, granos y otros productos.

Del mismo modo les inquieta el estado del agua para consumo y uso diario que extraen a través de punteras, por lo cual decidieron dejar de utilizarla como medida de precaución.

“Demandamos de las autoridades correspondientes y de la empresa, soluciones inmediatas ante esta emergencia ambiental. Somos una comunidad bastante pobre, la cual por muchos años ha trabajado la tierra y dependemos de ella. Nuestra comunidad se ha declarado en estado de alerta ante esta situación y exigiremos medidas compensatorias dignas que sean acordes con los daños producidos y las consecuencias futuras por esta negligencia de la empresa”, advirtieron los afectados.

Ante esto, el senador Navarro recalcó que Celulosa Nueva Aldea debe entender que los agricultores de Boca Itata afectados no se quedarían de brazos cruzados “viendo cómo perdían sus siembras de papas, producto de la inundación de cuatro metros de riles emanados de su ducto averiado”.

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Es por eso que además de presentar la denuncia ante la Superintendencia del Medio Ambiente, se interpuso un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Chillán, en contra de la empresa, pidiendo una orden de no innovar para que ésta deje de evacuar riles por el ducto mientras persista el problema.

“Solicitamos a la Corte que resuelva y ordene a Celulosa Nueva Aldea suspender la descarga de riles a través del cuestionado ducto y contrate una empresa especializada externa que le realice una auditoría ambiental y técnica, para que emita un informe detallado. Esto, para detectar y ubicar puntos críticos de eventuales roturas o filtraciones del ducto”, explicó Navarro.

Precisó también que en vista que las autoridades sanitarias no se han pronunciado en forma clara en contra de la empresa y a favor de los afectados, se le pidió a la Corte que ordene a la empresa proporcionar agua y contenedores en cantidad suficiente para asegurar el suministro durante la emergencia.

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