dimanche 21 juillet 2013

Buenos Aires: repudio al acuerdo YPF-Chevron y solidaridad con mapuches neuquinos

Organismos defensores de derechos humanos y referentes indígenas dieron una conferencia de prensa en el Serpaj en repudio al acuerdo YPF S.A.-Chevron Corporation y en solidaridad con el pueblo mapuche de Neuquén, afectado por la medida. / Señaló uno de los conferencistas: "“estamos viviendo un choque de la cultura capitalista en contra de la cultura indígena...”
Buenos Aires: repudio al acuerdo YPF-Chevron y solidaridad con mapuches neuquinos


Por Liliana Giambelluca
Argentina ((i))

Foto: Mariana Espinosa Obarrio

El “Acuerdo de Proyecto de Inversión” firmado entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Sociedad Anónima (YPF S.A.) y Chevron Corporation que se firmó este martes en Buenos Aires, cuyo objetivo es “el desarrollo de hidrocarburos no convencionales en la provincia del Neuquén”, generó una fuerte protesta por parte de mapuches de la zona y el rechazo de organismos defensores de derechos humanos de Buenos Aires.

Si bien las negociaciones datan de hace más de diez meses y la multinacional ya está trabajando en la zona, el día de la firma del acuerdo los mapuches protestaron desde muy temprano en el territorio de Vaca Muerta. Horas más tarde, la Confederación Mapuche de Neuquén informó que YPF los invitó a una reunión para este jueves.

Chevron fue condenada por la justicia ecuatoriana tras encontrarla responsable de los daños socioambientales que ocasionó en la región amazónica por utilizar la técnica de fractura hidráulica (Fracking). Este método no convencional de hidrocarburos utiliza elementos químicos altamente contaminantes en las napas subterráneas, en el medio ambiente, en la biodiversidad y, como consecuencia de ello, también enferma la salud de los pobladores cercanos, por tal motivo está prohibido por el Parlamento Europeo y diversas naciones.

En Buenos Aires, representantes de organismos defensores de derechos humanos y referentes indígenas dieron una conferencia de prensa este miércoles en el Servicio Paz y Justicia (Serpaj), en repudio a dicho acuerdo y en solidaridad con el pueblo mapuche.

Tomaron la palabra el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, Nora de Cortiñas y Mirta Baravalle (Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora), Aldo Etchegoyen (Asamblea Permanente por los Derechos Humanos Nacional) y Pablo Pimentel (APDH-La Matanza). Por los pueblos originarios hablaron Roberto Aramayo, Nilo Cayuqueo e Ignacio Prafil.

Roberto Aramayo (originario diaguita) abrió la conferencia con la lectura de un comunicado firmado por el Consejo Plurinacional, la Mesa de Organizaciones y Comunidades de Pueblos Originarios de la provincia de Buenos Aires y de Capital Federal (ver documento completo al final).

A continuación, Nilo Cayuqueo, mapuche de la ciudad de Los Toldos, se solidarizó con sus hermanos y manifestó su “rechazo y repudio por este nuevo atropello de los gobiernos provincial y nacional”, donde “no se han respetado los derechos de los pueblos originarios”. Mencionó que en la zona centro de la provincia de Neuquén, la petrolera española Repsol “hizo daños irreparables en varias comunidades y los hermanos ya no pueden consumir el agua porque está contaminada”.

Recordó a Cristina Lincopan, una de las principales líderes de la resistencia mapuche a las petroleras, quien falleció el 14 de marzo de este año, a los 30 años de edad, y la comunidad entiende que su dolencia fue causada por la contaminación ambiental.

Cayuqueo agregó que el “gobierno negocia para que las corporaciones ganen dinero, sin importar el medio ambiente, la calidad de vida de la gente y el futuro de las nuevas generaciones”. Llamó a la unidad de “todos los sectores que se sientan afectados por esta política extractivista y que quieran construir una sociedad más justa, igualitaria, donde se respete la diversidad cultural”.

Ignacio Prafil, coordinador del Parlamento Mapuche de Río Negro, dijo que en las comunidades se presenta “un gran debate porque juegan con las necesidades laborales, como lo hacen con las mineras, para quebrar la lucha. Ayer nos decían ‘por 150 mapuches que tomaron dos pozos no podemos parar esta magnitud de trabajo que nos viene a dar la empresa’. Justamente es el tema donde queremos entablar un diálogo”.

Sostuvo que “la justicia viola los derechos de los pueblos originarios, de los trabajadores, de los estudiantes, de los campesinos”, y que “deben recorrerse los territorios para conversar acerca de “los derechos indígenas”.

El Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, habló del daño socioambiental que produce el fracking y consideró que lo que debe debatirse es “el concepto de desarrollo”, porque “una cosa es la explotación donde se privilegia el capital financiero por sobre la vida del pueblo”, y otra cosa es “el desarrollo que debe ser distributivo y equitativo para todos los sectores”.

Dijo que el acuerdo YPF-Chevron viola “los derechos de las comunidades originarias” y “si la presidenta dice que gobierna para 40 millones de habitantes, me pregunto si los pueblos originarios están incluidos o excluidos”.

Pérez Esquivel sostuvo que cuando el 4 de junio de este año la Corte Suprema de Justicia de la Nación hizo lugar a una queja presentada por Chevron y revocó el fallo que trababa el embargo dispuesto por Ecuador, sentó “un antecedente jurídico sumamente grave no sólo para el presente, sino también para el futuro de nuestros pueblos”. De modo tal que “vamos a tener que recurrir a los tribunales internacionales” porque el gobierno no sólo firma “acuerdos para la explotación petrolera, sino también para la megaminería, los monocultivos y el uso de los agrotóxicos, que provocan gravísimos daño a la población”.

El premio Nobel propuso realizar “un pedido formal a YPF para que nos entreguen los estudios de impacto ambiental, los contratos y acuerdos” firmados con la multinacional, y presentar “un recurso de amparo” ante la justicia.

Aldo Echegoyen sostuvo que “estamos viviendo un choque de la cultura capitalista en contra de la cultura indígena”. El capitalismo abona “la cultura de los buenos negocios, en este caso con Chevron” y “la cultura indígena defiende la tierra, el agua y la pureza del aire”.

Dirigiéndose a los originarios, Nora de Cortiñas dijo: “sepan que no están solos. Las Madres sabemos que nuestros hijos estarían con ustedes defendiendo sus mismos derechos. Estamos solidarias y esperamos que estas empresas multinacionales se vayan, así de sencillito, que se vayan” porque “el fracking estropea la tierra, el medioambiente, el agua, el aire y la vida de los seres humanos”.

Mirta Baravalle pidió a los partidos políticos, “que en este momento están en campaña”, que instalen en sus debates “la problemática” que significa utilizar la técnica de fracking y “qué produce en las comunidades”.

Por último, Pablo Pimentel sostuvo que mientras el Gobierno habla de conformar “la patria grande latinoamericana” firma un acuerdo con Chevron. De ese modo Argentina “le dio la espalda” al pueblo, a la justicia ecuatoriana y a la decisión del presidente Rafael Correa de juzgar a la multinacional. A la vez, la justicia argentina “absuelve la condena de un país hermano”.

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